La pasta suele quedar rica con cualquier cosa, por lo menos a mí me lo parece. Como más me gusta es simplemente con verduras y un toque dulce gracias a las pasas. Y si se quiere, se puede preparar una salsa roquefort, simplemente mezclando media cuña de queso con el líquido que más les guste. Verterlo poco a poco, aplastar con el tenedor y añadir líquido según queramos la consistencia.


INGREDIENTES PARA DOS: 1 cucharada de aceite de oliva, agua, sal, orégano, 2 dientes de ajo picados, 1 calabacín mediano y 1 zanahoria hermosa cortados en cuadraditos, una cebolla pequeña picada, 150 gramos de champiñones frescos laminados, 25 gramos de bacón y 50 de jamón cocido o serrano en tacos y 180 de espaguetis. Cebollino fresco por encima.

INGREDIENTES PARA LA SALSA: 1 cuña de queso roquefort y unos 25-35 ml. de zumo de manzana gasificada o sidra.


 ELABORACIÓN: Pochar o rehogar  la cebolla con una cucharada pequeña de aceite de oliva. Cuando coja un poco de color, añadir la zanahoria, los ajos y mantener unos 7 minutos a fuego medio. Introducir el resto de las verduras, las pasas y orégano. Cuando estén en su punto, tiernas, incorporamos el bacón. Dorar y poner los tacos de jamón. Remover, probar y salar en este momento si el jamón es serrano. Si se trata de jamón cocido, salaremos unos 5 minutos antes. La pasta la habremos preparado en abundante agua hirviendo, con un poco de sal, y la tendremos el tiempo indicado en el paquete. Remover de vez en cuando, escurrir y lista para mezclar. Servir con salsa o sin ella y espolvorear con cebollino fresco.


RECOMENDACIONES: Para la salsa mejor un vino blanco afrutado, semi-seco, una buena sidra, zumo gasificado de manzana o cerveza, por ejemplo. Si se quiere, se puede calentar un poco. Eso sí, sin dejar de remover.